Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Job 17, 3-9

3 Coloca, pues, mi fianza junto a ti, ¿quién, si no, querrá chocar mi
mano?

4 Tú has cerrado su mente a la razón, por eso ninguna mano se levanta
5 Como el que anuncia a sus amigos un reparto, cuando languidecen

los ojos de sus hijos,

6 me he hecho yo proverbio de las gentes, alguien a quien escupen en
la cara.

7 Mis ojos se apagan de pesar, mis miembros se desvanecen como
sombra.

8 Los hombres rectos quedan de ello asombrados, contra el impío se
indigna el inocente;

9 el justo se afianza en su camino, y el de manos puras redobla su
energía.