Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Jueces 1, 18-35

18 Judá se apoderó de Gaza y su comarca, de Ascalón y su comarca,
de Ecrón y su comarca;

19 Yahveh estuvo con Judá, que conquistó la Montaña; pero no pudo
expulsar a los habitantes del llano, porque tenían carros de hierro.

20 Dieron Hebrón a Caleb, según el mandato de Moisés: y él arrojó de
allí a los tres hijos de Anaq.

21 Los hijos de Benjamín no expulsaron a los jebuseos que habitaban
en Jerusalén; por eso los jebuseos siguen habitando en Jerusalén con
los
hijos de Benjamín, hasta el día de hoy.

22 También la casa de José subió a Betel; Yahveh estuvo con ella.

23 La casa de José hizo una exploración por Betel. (Antes la ciudad se
llamaba Luz.)

24 Los espías vieron a un hombre que salía de la ciudad y le dijeron:

«Indícanos la entrada de la ciudad y te lo agradeceremos.»

25 El les enseñó la entrada de la ciudad: la pasaron a cuchillo, y
dejaron libre a aquel hombre con toda su familia.

26 El hombre se fue al país de los hititas y construyó una ciudad, a la
que llamó Luz. Es el nombre que tiene hasta la fecha.

27 Manasés no se apoderó de Bet Seán y sus filiales, ni de Tanak y sus
filiales. No expulsó a los habitantes de Dor y sus filiales, ni a
los de
Yibleam y sus filiales, ni a los de Meguiddó y sus filiales: los
cananeos
siguieron ocupando el territorio.

28 Sin embargo, cuando Israel cobró más fuerza, sometió a los
cananeos a tributo, aunque no llegó a expulsarlos.


29 Tampoco Efraím expulsó a los cananeos que habitaban en Guézer,
de manera que los cananeos siguieron viviendo en Guézer, en medio de
Israel.

30 Zabulón no expulsó a los habitantes de Quitrón, ni a los de
Nahalol. Los cananeos se quedaron en medio de Zabulón, pero fueron
sometidos a tributo.

31 Aser no expulsó a los habitantes de Akko, ni a los de Sidón, de
Majaleb, de Akzib, de Jelbá, de Afiq, ni de Rejob.

32 Los aseritas se establecieron, pues, entre los cananeos que
habitaban en el país, porque no los expulsaron.

33 Neftalí no expulsó a los habitantes de Bet Semes, ni a los de Bet
Anat, y se estableció entre los cananeos que habitaban en el país; pero los
habitantes de Bet Semes y de Bet Anat fueron sus tributarios.

34 Los amorreos rechazaron hacia la montaña a los hijos de Dan sin
dejarles bajar a la llanura.

35 Los amorreos se mantuvieron en Har Jéres, en Ayyalón y en
Saalbim, pero luego pesó sobre ellos la mano de la casa de José y fueron
reducidos a tributo.