Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Salmo 68, 9-21

9 (10) Tú derramaste, oh Dios, una lluvia de larguezas, a tu heredad
extenuada, tú la reanimaste;

10 (11) tu grey halló una morada, aquella que en tu bondad, oh Dios,
al desdichado preparabas.

11 (12) El Señor da la palabra: es el anuncio de un ejército inmenso.
12 (13) Y mientras los reyes, los ejércitos huyen, huyen, la bella de la

casa reparte el botín.

13 (14) Mientras vosotros descansáis entre las tapias del aprisco, las
alas de la Paloma se cubren de plata, y sus plumas de destellos de
oro
verde;

14 (15) cuando Sadday dispersa a los reyes, por ella cae la nieve en el
Monte Umbrío.

15 (16) ¡Monte de Dios, el monte de Basán! ¡Monte escarpado, el
monte de Basán!


16 (17) ¿Por que miráis celosos, montes escarpados, al monte que
Dios escogió por mansión? ¡Oh sí, Yahveh morará allí para siempre!

17 (18) Los carros de Dios, por millares de miríadas; el Señor ha
venido del Sinaí al santuario.

18 (19) Tú has subido a la altura, conduciendo cautivos, has recibido
tributo de hombres, hasta los rebeldes para que Yahveh Dios tuviera
una
morada.

19 (20) ¡Bendito sea el Señor día tras día! El carga con nosotros, Dios
de nuestra salvación. = Pausa. =

20 (21) Dios libertador es nuestro Dios; del Señor Yahveh son las
salidas de la muerte;

21 (22) mas la cabeza de sus enemigos Dios quebranta, la testa
cabelluda de quien sus crímenes pasea.