28La tierra da el fruto por sí misma 29Y cuando el fruto lo admite, en seguida se le mete la hoz, porque ha llegado la siega." 30Decía también: "¿Con qué compararemos el Reino de Dios o con qué parábola lo expondremos? 31Es como un grano de mostaza que, cuando se siembra en la tierra, es más pequeña que cualquier semilla que se siembra en la tierra