1Sucedió que un sábado fue a comer a casa de uno de los jefes de los fariseos. Ellos le estaban observando. 2Había allí, delante de él, un hombre hidrópico. 3Entonces preguntó Jesús a los legistas y a los fariseos: "¿Es lícito curar en sábado, o no?" 4Pero ellos se callaron. Entonces le tomó, le curó y le despidió. 5Y a ellos les dijo: "¿A quién de vosotros se le cae un hijo o un buey a un pozo en día de sábado y no lo saca al momento?" 6Y no pudieron replicar a esto. 7Notando cómo los invitados elegían los primeros puestos, les dijo una parábola: 8"Cuando alguien te invite a una boda, no te pongas en el primer puesto, no sea que haya invitado a otro más distinguido que tú 9y, viniendo el que os invitó a ti y a él, te diga: "Deja el sitio a éste", y tengas que ir, avergonzado, a sentarte en el último puesto.