22Sucedió, pues, que murió el pobre y los ángeles le llevaron al seno de Abrahán. Murió también el rico y fue sepultado. 23"Estando en el Hades entre tormentos, levantó los ojos y vio a lo lejos a Abrahán, y a Lázaro en su seno. 24Y, gritando, dijo: "Padre Abrahán, ten compasión de mí y envía a Lázaro a que moje en agua la punta de su dedo y refresque mi lengua, porque estoy atormentado en esta llama." 25Pero Abrahán le dijo: "Hijo, recuerda que recibiste tus bienes durante tu vida y Lázaro, al contrario, sus males 26Y además, entre nosotros y vosotros se interpone un gran abismo, de modo que los que quieran pasar de aquí a vosotros, no puedan hacerlo 27"Replicó: "Pues entonces, te ruego, padre, que le envíes a la casa de mi padre, 28porque tengo cinco hermanos, para que les advierta y no vengan también ellos a este lugar de tormento." 29Abrahán le dijo: "Tienen a Moisés y a los profetas 30Él dijo: "No, padre Abrahán, que si alguno de entre los muertos va a ellos, se convertirán." 31Le contestó: "Si no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se convencerán aunque un muerto resucite."