2vio también a una viuda pobre, que echaba allí dos moneditas, 3y dijo: "De verdad os digo que esta viuda pobre ha echado más que nadie. 4Porque todos éstos han echado como donativo de lo que les sobra, ésta en cambio ha echado de lo que necesita, de todo lo que tiene para vivir." 5Como algunos hablaban del Templo, de cómo estaba adornado de bellas piedras y ofrendas votivas, él dijo: 6"De esto que veis, llegarán días en que no quedará piedra sobre piedra que no sea derruida." 7Le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo sucederá eso? Y ¿cuál será la señal de que todas estas cosas están para ocurrir?" 8Él dijo: "Mirad, no os dejéis engañar. Porque vendrán muchos usurpando mi nombre y diciendo: "Yo soy" y "el tiempo está cerca". No les sigáis. 9Cuando oigáis hablar de guerras y revoluciones, no os aterréis 10Entonces les dijo: "Se levantará nación contra nación y reino contra reino. 11Habrá grandes terremotos, peste y hambre en diversos lugares, habrá cosas espantosas y grandes señales del cielo. 12"Pero, antes de todo esto, os echarán mano y os perseguirán, os entregarán a las sinagogas y cárceles y os llevarán ante reyes y gobernadores por mi nombre 13esto os sucederá para que deis testimonio.