51Pero Jesús dijo: "¡Dejad! ¡Basta ya!" Y tocando la oreja le curó. 52Dijo Jesús a los sumos sacerdotes, a los jefes de la guardia del Templo y a los ancianos que habían venido contra él: "¿Como contra un salteador habéis salido con espadas y palos? 53Estaba yo todos los días en el Templo con vosotros y no me pusisteis las manos encima