34que decían: "¡Es verdad! ¡El Señor ha resucitado y se ha aparecido a Simón!" 35Ellos, por su parte, contaron lo que había pasado en el camino y cómo le habían conocido al partir el pan. 36Estaban hablando de estas cosas, cuando él se presentó en medio de ellos y les dijo: "La paz con vosotros." 37Sobresaltados y asustados, creían ver un espíritu. 38Pero él les dijo: "¿Por qué os turbáis? ¿Por qué se suscitan dudas en vuestro corazón? 39Mirad mis manos y mis pies 40Y, diciendo esto, les mostró las manos y los pies. 41Como no acababan de creérselo a causa de la alegría y estaban asombrados, les dijo: "¿Tenéis aquí algo de comer?" 42Ellos le ofrecieron un trozo de pescado. 43Lo tomó y comió delante de ellos. 44Después les dijo: "Éstas son aquellas palabras mías que os dije cuando todavía estaba con vosotros: Es necesario que se cumpla todo lo que está escrito en la Ley de Moisés, en los Profetas y en los Salmos acerca de mí." 45Y, entonces, abrió sus inteligencias para que comprendieran las Escrituras 46y les dijo: "Así está escrito: que el Cristo debía padecer y resucitar de entre los muertos al tercer día 47y que se predicaría en su nombre la conversión para perdón de los pecados a todas las naciones, empezando desde Jerusalén. 48Vosotros sois testigos de estas cosas. 49"Mirad, yo voy a enviar sobre vosotros la Promesa de mi Padre. Vosotros permaneced en la ciudad hasta que seáis revestidos de poder desde lo alto." 50Los sacó hasta cerca de Betania y, alzando sus manos, los bendijo. 51Y, mientras los bendecía, se separó de ellos y fue llevado al cielo. 52Ellos, después de postrarse ante él, se volvieron a Jerusalén con gran gozo.