14Al desembarcar, vio mucha gente, sintió compasión de ellos y curó a sus enfermos. 15Al atardecer se le acercaron los discípulos diciendo: "El lugar está deshabitado, y la hora es ya pasada. Despide, pues, a la gente, para que vayan a los pueblos y se compren comida." 16Mas Jesús les dijo: "No tienen por qué marcharse 17Dícenle ellos: "No tenemos aquí más que cinco panes y dos peces." 18Él dijo: "Traédmelos acá." 19Y ordenó a la gente reclinarse sobre la hierba 20Comieron todos y se saciaron, y recogieron de los trozos sobrantes doce canastos llenos. 21Y los que habían comido eran unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños. 22Inmediatamente obligó a los discípulos a subir a la barca y a ir por delante de él a la otra orilla, mientras él despedía a la gente. 23Después de despedir a la gente, subió al monte a solas para orar 24La barca se hallaba ya distante de la tierra muchos estadios, zarandeada por las olas, pues el viento era contrario. 25Y a la cuarta vigilia de la noche vino él hacia ellos, caminando sobre el mar. 26Los discípulos, viéndole caminar sobre el mar, se turbaron y decían: "Es un fantasma", y de miedo se pusieron a gritar. 27Pero al instante les habló Jesús diciendo: "¡Ánimo!, soy yo 28Pedro le respondió: "Señor, si eres tú, mándame ir hacia ti sobre las aguas." 29"¡Ven!", le dijo. Bajó Pedro de la barca y se puso a caminar sobre las aguas, yendo hacia Jesús. 30Pero, viendo la violencia del viento, le entró miedo y, como comenzara a hundirse, gritó: "¡Señor, sálvame!" 31Al punto Jesús, tendiendo la mano, le agarró y le dice: "Hombre de poca fe, ¿por qué dudaste?" 32Subieron a la barca y amainó el viento. 33Y los que estaban en la barca se postraron ante él diciendo: "Verdaderamente eres Hijo de Dios."