39Y adelantándose un poco, cayó rostro en tierra, y suplicaba así: "Padre mío, si es posible, que pase de mí esta copa, pero no sea como yo quiero, sino como quieres tú." 40Viene entonces a los discípulos y los encuentra dormidos 41Velad y orad, para que no caigáis en tentación 42Y alejándose de nuevo, por segunda vez oró así: "Padre mío, si esta copa no puede pasar sin que yo la beba, hágase tu voluntad." 43Volvió otra vez y los encontró dormidos, pues sus ojos estaban cargados. 44Los dejó y se fue a orar por tercera vez, repitiendo las mismas palabras. 45Viene entonces a los discípulos y les dice: "Ahora ya podéis dormir y descansar. Mirad, ha llegado la hora en que el Hijo del hombre va a ser entregado en manos de pecadores. 46¡Levantaos!, ¡vámonos! Mirad que el que me va a entregar está cerca." 47Todavía estaba hablando, cuando llegó Judas, uno de los Doce, acompañado de un grupo numeroso con espadas y palos, de parte de los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo. 48El que le iba a entregar les había dado esta señal: "Aquel a quien yo dé un beso, ése es