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Evangelio: Mateo 9,31-34.
31 Pero ellos, en cuanto salieron, divulgaron su fama por toda aquella comarca.
32 Salían ellos todavía, cuando le presentaron un mudo endemoniado.
33 Y expulsado el demonio, rompió a hablar el mudo. Y la gente, admirada, decía: "Jamás se vio cosa igual en Israel."
34 Pero los fariseos decían: "Por el Príncipe de los demonios expulsa a los demonios."
32 Salían ellos todavía, cuando le presentaron un mudo endemoniado.
33 Y expulsado el demonio, rompió a hablar el mudo. Y la gente, admirada, decía: "Jamás se vio cosa igual en Israel."
34 Pero los fariseos decían: "Por el Príncipe de los demonios expulsa a los demonios."
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