18No me refiero a todos vosotros 19"Os lo digo desde ahora, antes de que suceda, para que, cuando suceda, creáis que Yo Soy. 20En verdad, en verdad os digo: quien acoja al que yo envíe, me acoge a mí, y quien me acoja a mí, acoge a aquel que me ha enviado." 21Cuando dijo estas palabras, Jesús se turbó en su interior y declaró: "En verdad, en verdad os digo que uno de vosotros me entregará." 22Los discípulos se miraban unos a otros, sin saber de quién hablaba. 23Uno de sus discípulos, el que Jesús amaba, estaba a la mesa al lado de Jesús. 24Simón Pedro le hace una seña y le dice: "Pregúntale de quién está hablando." 25Él, recostándose sobre el pecho de Jesús, le dice: "Señor, ¿quién es?" 26Le responde Jesús: "Es aquel a quien dé el bocado que voy a mojar." Y, mojando el bocado, lo toma y se lo da a Judas, hijo de Simón Iscariote. 27Y entonces, tras el bocado, entró en él Satanás. Jesús le dice: "Lo que vas a hacer, hazlo pronto." 28Pero ninguno de los comensales entendió por qué se lo decía. 29Como Judas tenía la bolsa, algunos pensaban que Jesús quería decirle: "Compra lo que nos hace falta para la fiesta", o que diera algo a los pobres. 30En cuanto tomó Judas el bocado, salió. Era de noche. 31Cuando salió, dice Jesús: "Ahora ha sido glorificado el Hijo del hombre y Dios ha sido glorificado en él. 32Si Dios ha sido glorificado en él, Dios también le glorificará en sí mismo y le glorificará pronto. 33"Hijos míos, ya poco tiempo voy a estar con vosotros. Vosotros me buscaréis, y, lo mismo que les dije a los judíos, que adonde yo voy, vosotros no podéis venir, os digo también ahora a vosotros. 34Os doy un mandamiento nuevo: que os améis los unos a los otros. Que, como yo os he amado, así os améis también vosotros los unos a los otros. 35En esto conocerán todos que sois discípulos míos: si os tenéis amor los unos a los otros." 36Simón Pedro le dice: "Señor, ¿a dónde vas?" Jesús le respondió: "Adonde yo voy no puedes seguirme ahora 37Pedro le dice: "¿Por qué no puedo seguirte ahora? Yo daré mi vida por ti." 38Le responde Jesús: "¿Que darás tu vida por mí? En verdad, en verdad te digo: no cantará el gallo antes que tú me hayas negado tres veces."