9Le dice Simón Pedro: "Señor, no sólo los pies, sino hasta las manos y la cabeza." 10Jesús le dice: "El que se ha bañado, no necesita lavarse 11Sabía quién le iba a entregar, y por eso dijo: "No estáis limpios todos." 12Después que les lavó los pies, tomó sus vestidos, volvió a la mesa, y les dijo: "¿Comprendéis lo que he hecho con vosotros? 13Vosotros me llamáis "el Maestro" y "el Señor", y decís bien, porque lo soy. 14Pues si yo, el Señor y el Maestro, os he lavado los pies, vosotros también debéis lavaros los pies unos a otros. 15Porque os he dado ejemplo, para que también vosotros hagáis como yo he hecho con vosotros. 16"En verdad, en verdad os digo: no es más el siervo que su amo, ni el enviado más que el que lo envía. 17"Sabiendo esto, dichosos seréis si lo cumplís. 18No me refiero a todos vosotros 19"Os lo digo desde ahora, antes de que suceda, para que, cuando suceda, creáis que Yo Soy. 20En verdad, en verdad os digo: quien acoja al que yo envíe, me acoge a mí, y quien me acoja a mí, acoge a aquel que me ha enviado." 21Cuando dijo estas palabras, Jesús se turbó en su interior y declaró: "En verdad, en verdad os digo que uno de vosotros me entregará." 22Los discípulos se miraban unos a otros, sin saber de quién hablaba. 23Uno de sus discípulos, el que Jesús amaba, estaba a la mesa al lado de Jesús.