2Los soldados trenzaron una corona de espinas, se la pusieron en la cabeza y le vistieron un manto de púrpura 3y, acercándose a él, le decían: "Salve, rey de los judíos." Y le daban bofetadas. 4Volvió a salir Pilato y les dijo: "Mirad, os lo traigo fuera para que sepáis que no encuentro ningún delito en él." 5Salió entonces Jesús fuera llevando la corona de espinas y el manto de púrpura. Díceles Pilato: "Aquí tenéis al hombre." 6Cuando lo vieron los sumos sacerdotes y los guardias, gritaron: "¡Crucifícalo, crucifícalo!" Les dice Pilato: "Tomadlo vosotros y crucificadle, porque yo no encuentro en él ningún delito." 7Los judíos le replicaron: "Nosotros tenemos una Ley y según esa Ley debe morir, porque se tiene por Hijo de Dios."