6 Así dice Yahveh: ¡Por tres crímenes de Israel y por cuatro, seré
inflexible! Porque venden al justo por dinero y al pobre por un par
de
sandalias;
7 pisan contra el polvo de la tierra la cabeza de los débiles, y
el
camino de los humildes tuercen; hijo y padre acuden a la misma moza, para
profanar mi santo Nombre;
8 sobre ropas empeñadas se acuestan junto a cualquier altar, y el vino
de los que han multado beben en la casa de su dios...
9 Yo había destruido al amorreo delante de ellos, que era alto como la
altura de los cedros y fuerte como las encinas; yo había destruido su fruto
por arriba y sus raíces por abajo.
10 Y yo os hice subir a vosotros del país de Egipto y os llevé por el
desierto cuarenta años, para que poseyeseis la tierra del amorreo.
11 Yo suscité profetas entre vuestros hijos, y nazireos entre vuestos
jóvenes. ¿No es así, hijos de Israel?, oráculo de Yahveh.
12 Y vosotros habéis hecho beber vino a los nazireos, y habéis
conminado a los profetas, diciendo: «¡No profeticéis!»
13 ¡Pues bien, yo os estrujaré debajo, como estruja el carro que está
lleno de haces!
14 Entonces le fallará la huida al raudo, el fuerte no podrá desplegar
su vigor, y ni el bravo salvará su vida.