5 Pero no busquéis a Betel, no vayáis a Guilgal ni paséis a Berseba,
porque Guilgal será deportada sin remedio, y Betel será reducida a la nada.
6 ¡Buscad a Yahveh y viviréis, no sea que caiga él como fuego sobre
la casa de José, y devore a Betel sin que haya quien apague!
7 ¡Ay de los que cambian en ajenjo el juicio y tiran por tierra la
justicia,
8 El hace las Pléyades y Orión, trueca en mañana las sombras, y hace
oscurecer el día en noche. El llama a las aguas del mar, y sobre la haz de la
tierra las derrama, Yahveh es su nombre;