3 Y cantan el cántico de Moisés, siervo de Dios, y el cántico del
Cordero, diciendo: «Grandes y maravillosas son tus obras, Señor, Dios
Todopoderoso; justos y verdaderos tus caminos, = ¡oh Rey de las naciones!
=
4 = ¿Quién no temerá, = Señor, y no glorificará tu nombre? Porque
sólo tú eres santo, = y todas las naciones vendrán y se postrarán ante ti, =
porque han quedado de manifiesto tus justos designios».
5 Después de esto vi que se abría en el cielo el Santuario de la Tienda
del Testimonio,