11 Luego vi un gran trono blanco, y al que estaba sentado sobre él. El
cielo y la tierra huyeron de su presencia sin dejar rastro.
12 Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie delante del trono; =
fueron abiertos unos libros, = y luego se abrió otro libro, que es
el de la
vida; y los muertos fueron juzgados según lo escrito en los libros, conforme
a sus obras.