Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Apocalipsis 21, 6-22

6 Me dijo también: «Hecho está: yo soy el Alfa y la Omega, el
Principio y el Fin; al que tenga sed, yo le daré del manantial del agua de la
vida gratis.

7 Esta será la herencia del vencedor: = yo seré = Dios = para él, y él
será hijo para mi. =

8 Pero los cobardes, los incrédulos, los abominables, los asesinos, los
impuros, los hechiceros, los idólatras y todos los embusteros tendrán
su
parte en el lago que arde con fuego y azufre: que es la muerte segunda.


9 Entonces vino uno de los siete Ángeles que tenían las siete copas
llenas de las siete últimas plagas, y me habló diciendo: «Ven, que te voy a
enseñar a la Novia, a la Esposa del Cordero.»

10 = Me trasladó en espíritu a un monte grande y alto = y me mostró
la Ciudad Santa de Jerusalén, que bajaba del cielo, de junto a Dios,

11 y = tenía la gloria de Dios. = Su resplandor era como el de
una
piedra muy preciosa, como jaspe cristalino.

12 Tenía una muralla grande y alta con doce puertas; y sobre las
puertas, doce Ángeles y nombres grabados, que son = los de las doce tribus
de los hijos de Israel; =

13 = al oriente tres puertas; al norte tres puertas; al mediodía
tres
puertas; al occidente tres puertas. =

14 La muralla de la ciudad se asienta sobre doce piedras, que llevan
los nombres de los doce Apóstoles del Cordero.

15 El que hablaba conmigo tenía una caña de medir, de oro, para
medir la ciudad, sus puertas y su muralla.

16 La ciudad es un cuadrado: su largura es igual a su anchura. Midió
la ciudad con la caña, y tenía 12.000 estadios. Su largura, anchura y altura
son iguales.

17 Midió luego su muralla, y tenía 144 codos - con medida humana,
que era la del Ángel -.

18 El material de esta muralla es jaspe y la ciudad es de oro puro
semejante al vidrio puro.

19 Los asientos de la muralla de la ciudad están adornados de toda
clase de piedras preciosas: el primer asiento es de jaspe, el
segundo de
zafiro, el tercero de calcedonia, el cuarto de esmeralda,

20 el quinto de sardónica, el sexto de cornalina, el séptimo de
crisólito, el octavo de berilo, el noveno de topacio, el décimo de crisoprasa,
el undécimo de jacinto, el duodécimo de amatista.

21 Y las doce puertas son doce perlas, cada una de las puertas hecha
de una sola perla; y la plaza de la ciudad es de oro puro, trasparente como el
cristal.

22 Pero no vi Santuario alguno en ella; porque el Señor, el Dios
Todopoderoso, y el Cordero, es su Santuario.