23 Los hijos de Agar, que andan buscando la inteligencia en la tierra, los
mercaderes de Madián y de Temán, los autores de fábulas y los buscadores de
inteligencia, no conocieron el camino de la sabiduría ni tuvieron memoria de sus
senderos.
24 ¡Oh Israel, qué grande es la casa de Dios, qué vasto el lugar
de su
dominio!
25 Grande es y sin límites, excelso y sin medida.
26 Allí nacieron los famosos gigantes antiguos, de alta estatura y expertos
en la guerra.
27 Pero no fue a éstos a quienes eligió Dios ni les enseñó el camino de la
ciencia;
28 y perecieron por no tener prudencia, por su locura perecieron.
29 ¿Quién subió al cielo y la tomó? ¿quién la hizo bajar desde las nubes?
puro?
30 ¿Quién atravesó el mar y la encontró? ¿quién la traerá a precio de oro
31 No hay quien conozca su camino, nadie imagina sus senderos.
32 Pero el que todo lo sabe la conoce, con su inteligencia la escrutó, el que
dispuso la tierra para siempre y la llenó de animales cuadrúpedos,