Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Daniel 3, 7-10

7 Con tal motivo, en cuanto se oyó sonar el cuerno, el pífano, la cítara,
la sambuca, el salterio, la zampoña y toda clase de música, todos
los
pueblos, naciones y lenguas se postraron y adoraron la estatua de oro que
había erigido el rey Nabucodonosor.

8 Sin embargo, algunos caldeos se presentaron a denunciar a los
judíos.

9 Tomaron la palabra y dijeron al rey Nabucodonosor: «¡Viva el rey
eternamente!


10 Tú, oh rey, has ordenado que todo hombre, en cuanto oiga sonar el
cuerno, el pífano, la cítara, la sambuca, el salterio, la zampoña y toda clase
de música, se postre y adore la estatua de oro,