16 Entonces Daniel, por sobrenombre Beltsassar, quedó un instante
aturdido y turbado en sus pensamientos. El rey tomó la palabra y
dijo:
«Beltsassar, no te turbe este sueño y su interpretación.»
Respondió
Beltsassar: «¡ Oh mi señor, sea este sueño para tus
enemigos y su
interpretación para tus adversarios!
17 Ese árbol que has visto, que se hizo grande y corpulento, cuya
altura llegaba hasta el cielo y que era visible en toda la tierra,
18 que tenía hermoso ramaje y abundante fruto, en el que había
alimento para todos, bajo el cual se cobijaban las bestias del campo
y en
cuyas ramas anidaban los pájaros del cielo,
19 eres tú, oh rey, que te has hecho grande y poderoso, cuya grandeza
ha crecido y ha llegado hasta el cielo, y cuyo dominio se extiende hasta los
confines de la tierra.