17 No podrás comer en tus ciudades el diezmo de tu trigo, de tu mosto
o de tu aceite, ni los primogénitos de tu ganado mayor o menor, ninguna de
tus ofrendas votivas o de tus ofrendas voluntarias, ni las
ofrendas
reservadas de tus manos.
18 Sino que lo comerás en presencia de Yahveh tu Dios, en el lugar
elegido por Yahveh tu Dios y solamente allí, tú, tu hijo y tu hija, tu siervo y
tu sierva, y el levita que vive en tus ciudades. Y te regocijarás en presencia
de Yahveh tu Dios por todas tus empresas.
19 Guárdate de dejar abandonado al levita mientras vivas en tu suelo.