16 Es exactamente lo que tú pediste a Yahveh tu Dios en el Horeb, el
día de la Asamblea, diciendo: «Para no morir, no volveré a escuchar la voz
de Yahveh mi Dios, ni miraré más a este gran fuego».
17 Y Yahveh me dijo a mí: «Bien está lo que han dicho.
18 Yo les suscitaré, de en medio de sus hermanos, un profeta
semejante a ti, pondré mis palabras en su boca, y él les dirá todo lo que yo
le mande.
19 Si alguno no escucha mis palabras, las que ese profeta pronuncie en
mi nombre, yo mismo le pediré cuentas de ello.