4 Este es el caso del homicida que puede salvar su vida huyendo allá.
El que mate a su prójimo sin querer, sin haberle odiado antes
5 (por ejemplo, si va al bosque con su prójimo a cortar leña y, al
blandir su mano el hacha para tirar el árbol, se sale el hierro del mango y va
a herir mortalmente a su prójimo), éste puede huir a una de esas ciudades y
salvar su vida: