Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Deuteronomio 32, 30-31

30 Pues, ¿cómo un solo hombre puede perseguir a mil, y dos poner en
fuga a una miríada, sino porque su Roca se los ha vendido, porque Yahveh
los ha entregado?

31 Mas no es su roca como nuestra Roca, y nuestros enemigos son
testigos.