5 Por el contrario, esto es lo que haréis con ellos: demoleréis sus
altares, romperéis sus estelas, cortaréis sus cipos y prenderéis fuego a sus
ídolos.
6 Porque tú eres un pueblo consagrado a Yahveh tu Dios; él te ha
elegido a ti para que seas el pueblo de su propiedad personal entre todos los
pueblos que hay sobre la haz de la tierra.
7 No porque seáis el más numeroso de todos los pueblos se ha
prendado Yahveh de vosotros y os ha elegido, pues sois el menos numeroso
de todos los pueblos;
8 sino por el amor que os tiene y por guardar el juramento hecho a
vuestros padres, por eso os ha sacado Yahveh con mano fuerte y os
ha
librado de la casa de servidumbre, del poder de Faraón, rey de Egipto.
9 Has de saber, pues, que Yahveh tu Dios es el Dios verdadero, el
Dios verdadero, el Dios fiel que guarda la alianza y el amor por
mil
generaciones a los que le aman y guardan sus mandamientos,