...la Biblia de Jerusalén
Eclesiástico 20, 11-14
11 Por una palabra oída ya está el necio en dolores, como por el hijo
la mujer que da a luz.
12 Una flecha clavada en el muslo, tal es la palabra en las entrañas
del necio.
13 Interoga a tu amigo: quizá no haya hecho nada, y si acaso lo ha
hecho, para que no reincida.
14 Interroga a tu prójimo: quizá no ha dicho nada, y si acaso lo
ha
dicho, para que no repita.