...la Biblia de Jerusalén
Eclesiástico 22, 23-25
23 Desde la puerta el insensato fisga el interior, el hombre bien
educado queda afuera.
24 Es falta de educación escuchar a la puerta, tal descortesía indigna
al sensato.
25 Los labios de los habladores repiten las palabras ajenas, mas las
palabras de los prudentes se pesan en balanza.