4 De los impuros, ¿qué pureza puede resultar? de la mentira, ¿qué
verdad puede salir?
5 Adivinaciones, augurios y sueños cosas vanas son, como fantasías
de corazón de mujer en parto.
6 A menos que te sean enviadas por el Altísimo en visita, no abras tu
corazón a estas cosas.
7 Que a muchos extraviaron los sueños, y cayeron los que en ellos
esperaban.
8 Sin dolo se ha de cumplir la Ley, y sabiduría en boca fiel es
perfección.
9 Hombre que ha corrido mundo sabe muchas cosas, el que tiene
experiencia se expresa con inteligencia.
10 Quien no ha pasado pruebas poco sabe, quien ha corrido mundo
posee gran destreza.
11 Muchas cosas he visto en el curso de mis viajes, más vasta que mis
palabras es mi inteligencia.
12 Bien de veces he estado en peligro de muerte, y me salvé gracias a
todo esto.
13 El espíritu de los que temen al Señor vivirá, porque su esperanza
está puesta en aquel que los salva.
14 Quien teme al Señor de nada tiene miedo, y no se intimida, porque
él es su esperanza.
15 Feliz el alma del que teme al Señor: ¿en quién se sostiene? ¿cuál
es su apoyo?
16 Los ojos del Señor sobre quienes le aman, poderosa protección,
probado apoyo, abrigo contra el viento abrasador, abrigo contra el ardor del
mediodía, guardia contra tropiezos, auxilio contra caídas,
17 que levanta el alma, alumbra los ojos, da salud, vida y bendición.
18 Sacrificar cosa injusta es hacer ofrenda rechazada, no logran
complacencia los presentes de los sin ley.
19 No se complace el Altísimo en ofrendas de impíos, ni por el
cúmulo de víctimas perdona los pecados.
20 Inmola a un hijo a los ojos de su padre quien ofrece víctima a
costa de los bienes de los humildes.