12 Aún voy a hablar después de meditar, que estoy colmado como la
luna llena.
13 Escuchadme, hijos piadosos, y creced como rosa que brota junto a
corrientes de agua.
14 Como incienso derramad buen olor, abríos en flor como el lirio,
exhalad perfume, cantad un cantar, bendecid al Señor por todas sus obras.
15 Engrandeced su nombre, dadle gracias por su alabanza, con los
cantares de vuestros labios y con cítaras, decid así en acción de gracias:
16 ¡Qué hermosas son todas las obras del Señor! todas sus órdenes se
ejecutan a su hora. No hay por qué decir: ¿Qué es esto? Y esto ¿para qué?,
que todo se ha de buscar a su tiempo.