23 De igual modo las naciones recibirán en herencia su ira, como
cuando él cambió las aguas en salinas.
24 Sus caminos rectos son para los santos, así como para los sin ley
son piedras de tropiezo.
25 Los bienes están desde el principio creados para los buenos, así
como los males para los pecadores.
26 De primera necesidad para la vida del hombre es el agua, el fuego,
el hierro y la sal, la flor de harina de trigo, la leche y la miel, el jugo de
uva,
el aceite y el vestido.
27 Todo esto son bienes para los piadosos, mas para los pecadores se
truecan en males.