...la Biblia de Jerusalén
Eclesiástico 41, 18-22
18 La vida del que se basta a sí mismo y del obrero es dulce,
pero
más que ambos el que encuentra un tesoro.
19 Los hijos y la fundación de una ciudad perpetúan el nombre, pero
más que ambas cosas es estimada la mujer intachable.
20 El vino y la música ponen contento el corazón, pero más que
ambas cosas el amor a la sabiduría.
21 La flauta y el salterio hacen el canto suave, pero más que ambas
cosas la lengua dulce.
22 Gracia y belleza el ojo anhela, pero más que ambas cosas el verdor
del sembrado.