...la Biblia de Jerusalén
Eclesiástico 5, 1-5
1 Hijo, no prives al pobre del sustento, ni dejes en suspenso los ojos
suplicantes.
2 No entristezcas al que tiene hambre, no exasperes al hombre en su
indigencia.
3 No te ensañes con el corazón exasperado, no hagas esperar la
dádiva al mendigo.
4 No rechaces al suplicante atribulado, ni apartes tu rostro del pobre.
5 No apartes del mendigo tus ojos, ni des a nadie ocasión de
maldecirte.