Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Eclesiástico 52, 1-8

1 Quiero darte gracias, Señor, Rey, y alabarte, oh Dios mi salvador, a
tu nombre doy gracias.

2 Pues protector y auxilio has sido para mí, y has rescatado mi cuerpo
de la perdición, del lazo de la lengua insidiosa, de los labios que
urden
mentira; frente a mis adversarios has sido auxilio y me has rescatado,

3 según la abundancia de tu misericordia y la gloria de tu nombre, de
las dentelladas de los dispuestos a devorarme, de la mano de los que buscan
mi alma, de las muchas tribulaciones que he sufrido,

4 del ahogo del fuego que me envolvía, de entre el fuego que yo no
había encendido,

5 de la hondura de las entrañas del seol, de la lengua impura, de la
palabra mentirosa,

6 - calumnia de lengua injusta ante el rey. Cerca de la muerte estaba
mi alma, mi vida estaba junto al seol, abajo.

7 Por todas partes me asediaban y no había quien auxiliara, volví los
ojos a un apoyo humano y no había ninguno.

8 Entonces me acordé de tu misericordia, Señor, y de tu actuación
desde la eternidad, que tú levantas a los que en ti esperan, y los salvas de la
mano de enemigos.