...la Biblia de Jerusalén
Eclesiástico 52, 10-11
10 Clamé al Señor, padre de mi Señor: «No me abandones en días de
tribulación, en la hora de los orgullosos, cuando no hay socorro. Alabaré tu
nombre sin cesar, te cantaré en acción de gracias.»
11 Y mi oración fue escuchada, pues tú me salvaste de la perdición, y
me libraste del momento malo.