Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Eclesiástico 52, 4-14

4 del ahogo del fuego que me envolvía, de entre el fuego que yo no
había encendido,

5 de la hondura de las entrañas del seol, de la lengua impura, de la
palabra mentirosa,

6 - calumnia de lengua injusta ante el rey. Cerca de la muerte estaba
mi alma, mi vida estaba junto al seol, abajo.

7 Por todas partes me asediaban y no había quien auxiliara, volví los
ojos a un apoyo humano y no había ninguno.

8 Entonces me acordé de tu misericordia, Señor, y de tu actuación
desde la eternidad, que tú levantas a los que en ti esperan, y los salvas de la
mano de enemigos.


9 Y elevé de la tierra mi plegaria, supliqué ser librado de la muerte.
10 Clamé al Señor, padre de mi Señor: «No me abandones en días de

tribulación, en la hora de los orgullosos, cuando no hay socorro. Alabaré tu
nombre sin cesar, te cantaré en acción de gracias.»

11 Y mi oración fue escuchada, pues tú me salvaste de la perdición, y
me libraste del momento malo.

12 Por eso te daré gracias y te alabaré, bendeciré el nombre del Señor.

13 Siendo joven aún, antes de ir por el mundo, me di a buscar
abiertamente la sabiduría en mi oración,

14 a la puerta delante del templo la pedí, y hasta mi último día
la
andaré buscando.