28 Recuerda que por ellos has nacido, ¿cómo les pagarás lo que
contigo han hecho?
29 Con toda tu alma reverencia al Señor, y venera a sus sacerdotes.
30 Con todas tus fuerzas ama al que te hizo, y a sus ministros no
abandones.
31 Teme al Señor y honra el sacerdote, dale su porción como te está
prescrito: primicias, sacrificios de reparación, pierna de las
ofrendas,
oblación de santidad y primicias de las cosas sagradas.