...la Biblia de Jerusalén
Efesios 5, 4-23
4 Lo mismo de la grosería, las necedades o las chocarrerías, cosas que
no están bien; sino más bien, acciones de gracias.
5 Porque tened entendido que ningún fornicario o impuro o codicioso
- que es ser idólatra - participará en la herencia del Reino de Cristo y de
Dios.
6 Que nadie os engañe con vanas razones, pues por eso viene le cólera
de Dios sobre los rebeldes.
7 No tengáis parte con ellos.
8 Porque en otro tiempo fuisteis tinieblas; mas ahora sois luz en el
Señor. Vivid como hijos de la luz;
9 pues el fruto de la luz consiste en toda bondad, justicia y verdad.
10 Examinad qué es lo que agrada al Señor,
11 y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, antes
bien, denunciadlas.
12 Cierto que ya sólo el mencionar las cosas que hacen ocultamente
da vergüenza;
13 pero, al ser denunciadas, se manifiestan a la luz.
14 Pues todo lo que queda manifiesto es luz. Por eso se dice:
Despierta tú que duermes, y levántate de entre los muertos, y te iluminará
Cristo.
15 Así pues, mirad atentamente cómo vivís; que no sea como
imprudentes, sino como prudentes;
16 aprovechando bien el tiempo presente, porque los días son malos.
17 Por tanto, no seáis insensatos, sino comprended cuál es la voluntad
de Señor.
18 = No os embriaguéis con vino, = que es causa de libertinaje;
llenaos más bien del Espíritu.
19 Recitad entre vosotros salmos, himnos y cánticos inspirados;
cantad y salmodiad en vuestro corazón al Señor,
20 dando gracias continuamente y por todo a Dios Padre, en nombre
de nuestro Señor Jesucristo.
21 Sed sumisos los unos a los otros en el temor de Cristo.
22 Las mujeres a sus maridos, como al Señor,
23 porque el marido es cabeza de la mujer, como Cristo es Cabeza de
la Iglesia, el salvador del Cuerpo.