14 Nuestros jefes podrían representar a toda la asamblea: todos los que
en nuestras ciudades se hayan casado con mujeres extranjeras, vendrían a
plazos fijados, acompañados de los ancianos y los jueces de cada
ciudad,
hasta que hayamos apartado de nosotros el furor de la cólera de
nuestro
Dios por causa de este asunto.»