12 Dijo el rey a la reina Ester: «En la ciudadela de Susa han matado y
exterminado los judíos a quinientos hombres y a los diez hijos de
Amán.
¿Qué habrán hecho en las restantes provincias del rey? ¿Qué deseas pedir
ahora? Pues te será concedido. Se seguirá haciendo lo que tú desees.»
13 Respondió Ester: «Si al rey le parece bien, que se conceda a los
judíos de Susa que puedan actuar mañana según el edicto de hoy; cuanto a
los diez hijos de Amán, que sean colgados de la horca.»
14 Ordenó el rey que se hiciera así; se promulgó la ley en Susa y los
diez hijos de Amán fueron colgados.
15 Los judíos de Susa se reunieron también el día catorce del mes de
Adar y mataron en Susa a trescientos hombres, pero no saquearon sus
bienes.
16 Los judíos de las restantes provincias del rey se reunieron para
defender, contra sus enemigos, sus vidas y su seguridad; mataron de entre
sus adversarios a 75.000, pero no saquearon sus bienes.
17 Ocurrió esto el día trece del mes de Adar y el día catorce
descansaron, convirtiéndolo en un día de alegres festines.
18 Cuanto a los judíos de Susa, que se habían reunido los días trece y
catorce, descansaron el día quince, convirtiéndolo en un día de
alegres
festines.
19 Por eso, los judíos diseminados en las ciudades no fortificadas
celebran el día catorce del mes de Adar con alegres festines, como día de
fiesta, y se envían recíprocos regalos,
20 Mardoqueo consignó por escrito todas estas cosas y envió cartas a
los judíos de todas las provincias del rey Asuero tanto lejanos como
próximos,