18 Su padre, porque fue violento, cometió rapiñas y no obró bien en
medio de su pueblo, por eso morirá a causa de su culpa.
19 Y vosotros decís: «¿Por qué no carga el hijo con la culpa de su
padre?» Pero el hijo ha practicado el derecho y la justicia, ha
observado
todos mis preceptos y los ha puesto en práctica: vivirá sin duda.
20 El que peque es quien morirá; el hijo no cargará con la culpa de su
padre, ni el padre con la culpa de su hijo: al justo se le imputará su justicia
y
al malvado su maldad.
21 En cuanto al malvado, si se aparta de todos los pecados que ha
cometido, observa todos mis preceptos y practica el derecho y la
justicia,
vivirá sin duda, no morirá.
22 Ninguno de los crímenes que cometió se le recordará más; vivirá a
causa de la justicia que ha practicado.
23 ¿Acaso me complazco yo en la muerte del malvado - oráculo del
Señor Yahveh - y no más bien en que se convierta de su conducta y viva?
24 Pero si el justo se aparta de su justicia y comete el mal, imitando
todas las abominaciones que comete el malvado, ¿vivirá acaso? No, no
quedará ya memoria de ninguna de las obras justas que había
practicado,
sino que, a causa de la infidelidad en que ha incurrido y del pecado que ha
cometido, morirá.
25 Y vosotros decís: «No es justo el proceder del Señor.» Escuchad,
casa de Israel: ¿Que no es justo mi proceder? ¿No es más bien
vuestro
proceder el que no es justo?
26 Si el justo se aparta de su justicia, comete el mal y muere, a causa
del mal que ha cometido muere.
27 Y si el malvado se aparta del mal que ha cometido para practicar el
derecho y la justicia, conservará su vida.
28 Ha abierto los ojos y se ha apartado de todos los crímenes que
había cometido; vivirá sin duda, no morirá.
29 Y sin embargo la casa de Israel dice: «No es justo el proceder del
Señor.» ¿Que mi proceder no es justo, casa de Israel? ¿No es más
bien
vuestro proceder el que no es justo?
30 Yo os juzgaré, pues, a cada uno según su proceder, casa de Israel,
oráculo del Señor Yahveh. Convertíos y apartaos de todos
vuestros
crímenes; no haya para vosotros más ocasión de culpa.
31 Descargaos de todos los crímenes que habéis cometido contra mí, y
haceos un corazón nuevo y un espíritu nuevo. ¿Por qué habéis de
morir,
casa de Israel?
32 Yo no me complazco en la muerte de nadie, sea quien fuere,
oráculo del Señor Yahveh. Convertíos y vivid.