...la Biblia de Jerusalén
Filipenses 1, 8-12
8 Pues testigo me es Dios de cuánto os quiero a todos vosotros en el
corazón de Cristo Jesús.
9 Y lo que pido en mi oración es que vuestro amor siga creciendo cada
vez más en conocimiento perfecto y todo discernimiento,
10 con que podáis aquilatar los mejor para ser puros y sin tacha para el
Día de Cristo,
11 llenos de los frutos de justicia que vienen por Jesucristo, para
gloria y alabanza de Dios.
12 Quiero que sepáis, hermanos, que lo que me ha sucedido ha
contribuido más bien al progreso del Evangelio;