5 y llamó Dios a la luz «día», y a la oscuridad la llamó «noche». Y
atardeció y amaneció: día primero.
6 Dijo Dios: «Haya un firmamento por en medio de las aguas, que las
aparte unas de otras.»
7 E hizo Dios el firmamento; y apartó las aguas de por debajo del
firmamento, de las aguas de por encima del firmamento. Y así fue.
8 Y llamó Dios al firmamento «cielos». Y atardeció y amaneció: día
segundo.
9 Dijo Dios: «Acumúlense las aguas de por debajo del firmamento en
un solo conjunto, y déjese ver lo seco»; y así fue.
10 Y llamó Dios a lo seco «tierra», y al conjunto de las aguas lo llamó
«mares»; y vio Dios que estaba bien.
11 Dijo Dios: «Produzca la tierra vegetación: hierbas que den semillas
y árboles frutales que den fruto, de su especie, con su semilla dentro, sobre
la tierra.» Y así fue.