16 Respondió José a Faraón: «No hablemos de mí, que Dios responda
en buena hora a Faraón.»
17 Y refirió Faraón a José su sueño: «Resulta que estaba yo parado a
la orilla del río,
18 cuando de pronto suben del río siete vacas lustrosas y de hermoso
aspecto, las cuales pacían en el carrizal.
19 Pero he aquí que otras siete vacas subían detrás de aquéllas, de
muy ruin y mala catadura y macilentas, que jamás vi como aquéllas en toda
la tierra de Egipto, de tan malas.
20 Y las siete vacas macilentas y malas se comieron a las siete vacas
primeras, las lustrosas.