17 y Faraón dijo a José: «Di a tus hermanos: Haced esto: Cargad
vuestras acémilas y poneos inmediatamente en Canaán ,
18 tomad a vuestro padre y vuestras familias, y venid a mí, que yo os
daré lo mejor de Egipto, y comeréis lo más pingüe del país.
19 Por tu parte, ordénales: Haced esto: Tomad de Egipto carretas para
vuestros pequeños y mujeres, y os traéis a vuestro padre.
20 Y vosotros mismos no tengáis pena de vuestras cosas, que le mejor
de Egipto será para vosotros.»
21 Así lo hicieron los hijos de Israel; José les proporcionó carretas por
orden de Faraón; y les dio provisiones para el camino.
22 A todos ellos dio sendas mudas, pero a Benjamín le dio trescientas
piezas de plata y cinco mudas.
23 A su padre le envió asimismo diez burros cargados de lo mejor de
Egipto y diez asnas cargadas de trigo, pan y víveres para el viaje
de su
padre.
24 Luego despidió a sus hermanos, y cuando se iban les dijo: «No os
excitéis en el camino.»
25 Subieron, pues, de Egipto y llegaron a Canaán, a donde su padre
Jacob,
26 y le anunciaron: «Todavía vive José, y es el amo de todo Egipto.»
Pero él se quedó impasible, porque no les creía.
27 Entonces le repitieron todas las palabras que José les había dicho,
vio las carretas que José había enviado para trasportarle, y revivió
el
espíritu de su padre Jacob.
28 Y dijo Israel: «¡Esto me basta! Todavía vive mi hijo José: iré y le
veré antes de morirme.»