2 fijos los ojos en Jesús, el que inicia y consuma la fe, el cual, en lugar
del gozo que se le proponía, soportó la cruz sin miedo a la ignominia y =
está sentado a la diestra = del trono de Dios.
3 Fijaos en aquel que soportó tal contradicción de parte de los
pecadores, para que no desfallezcáis faltos de ánimo.
4 No habéis resistido todavía hasta llegar a la sangre en vuestra lucha
contra el pecado.