8 Porque si Josué les hubiera proporcionado el descanso, no habría
hablado Dios más tarde, de otro día.
9 Por tanto es claro que queda un descanso sabático para el pueblo de
Dios.
10 Pues quien = entra en su descanso, = también él = descansa de sus
trabajos, = al igual que Dios de los suyos.
11 Esforcémonos, pues, por = entrar en ese descanso, = para que nadie
caiga imitando aquella desobediencia.
12 Ciertamente, es viva la Palabra de Dios y eficaz, y más cortante
que espada alguna de dos filos. Penetra hasta las fronteras entre el alma y el
espíritu, hasta las junturas y médulas; y escruta los
sentimientos y
pensamientos del corazón.
13 No hay para ella criatura invisible: todo está desnudo y patente a
los ojos de Aquel a quien hemos de dar cuenta.
14 Teniendo, pues, tal Sumo Sacerdote que penetró los cielos - Jesús,
el Hijo de Dios - mantengamos firmes la fe que profesamos.
15 Pues no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse
de nuestras flaquezas, sino probado en todo igual que nosotros, excepto en
el pecado.