...la Biblia de Jerusalén
Hechos 1, 16-26
16 «Hermanos, era preciso que se cumpliera la Escritura en la que el
Espíritu Santo, por boca de David, había hablado ya acerca de Judas, el que
fue guía de los que prendieron a Jesús.
17 Porque él era uno de los nuestros y obtuvo un puesto en este
ministerio.
18 Este, pues, compró un campo con el precio de su iniquidad, y
cayendo de cabeza, se reventó por medio y se derramaron todas sus
entrañas. -
19 Y esto fue conocido por todos los habitantes de Jerusalén de forma
que el campo se llamó en su lengua Haqueldamá, es decir: “Campo de
Sangre” -
20 Pues en el libro de los Salmos está escrito: = Quede su majada
desierta, y no haya quien habite en ella. = Y también: = Que otro reciba su
cargo. =
21 «Conviene, pues, que de entre los hombres que anduvieron con
nosotros todo el tiempo que el Señor Jesús convivió con nosotros,
22 a partir del bautismo de Juan hasta el día en que nos fue llevado,
uno de ellos sea constituido testigo con nosotros de su resurrección.»
23 Presentaron a dos: a José, llamado Barsabás, por sobrenombre
Justo, y a Matías.
24 Entonces oraron así: «Tú, Señor, que conoces los corazones de
todos, muéstranos a cuál de estos dos has elegido,
25 para ocupar en el ministerio del apostolado el puesto del que Judas
desertó para irse adonde le correspondía.»
26 Echaron suertes y la suerte cayó sobre Matías, que fue agregado al
número de los doce apóstoles.